HISTORIA DE QUESERÍA LA ANTIGUA

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Antiguamente los pastores no sólo procuraban que sus rebaños de ovejas tuvieran suficiente pasto para producir leche de calidad. Se dedicaban a ellas en cuerpo y alma, cuidándolas, mimándolas, protegiéndolas, hasta el punto de pasar noches al raso en el campo, al pie del rebaño, como guardines celosos de su tesoro. No tenían más protección que las estrellas que surcaban el firmamento y eran el único testigo de su soledad y preocupaciones.

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Hoy en día esa costumbre ha desaparecido casi por completo, sólo queda en nuestro recuerdo.
Por eso, tras cuatro generaciones de pastores en nuestra familia, con nuestros quesos hemos querido rendirle un homenaje a nuestros pastores.

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​Cuando en 1994, Fernando Fregeneda, pastor por vocación, y Jesús Cruz, relacionado con el mundo lácteo, decidieron unir su pasión por la leche de oveja, nace Gestión Agro Ganadera, SL., empresa que se dedica a la comercialización de leche de oveja a nivel nacional e internacional.

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Su sueño no era sólamente comercializar esa leche, sino también elaborar uno de los productos más exquisitos de nuestra tierra: queso de oveja.

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Para ello rehabilitaron en su totalidad una antigua y prestigiosa fábrica en la localidad de Fuentesaúco (Zamora), provincia donde, desde siempre, se han producido los más famosos quesos regionales, con el nombre comercial de QUESERÍA LA ANTIGUA DE FUENTESAÚCO.

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Contaron en todo momento con el asesoramiento y buen hacer de la señora Claudia (madre de Fernando) y el señor Juan (suegro de Jesús), personas que hacían muy buen queso hace ya 40 años, pues ese era el sabor que Fernando y Jesús tan arduamente buscaban.

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A fecha de hoy, QUESERÍA LA ANTIGUA DE FUENTESAÚCO ya está presente en muchos puntos del territorio nacional así como en el territorio internacional, conservando en todo momento el amor hacia el queso y las formas tradicionales.